0-2 Morata por partida doble con dos golazos de cabeza, da la victoria a un buen Atleti, sobre todo en la primera mitad, que aguantó muy bien con diez tras el descanso. 

Tras el segundo clásico de la semana con la victoria del Barcelona en el Santiago Bernabéu, llegaba este gran partido en Anoeta para determinar si el Atleti era capaz de seguir la estela de los azulgranas, aún a distancia o se podía dar por cerrada ya LaLiga apenas iniciado el mes de marzo. Al final, el Atleti dio la talla y consiguió una importante victoria, que le permite seguir siendo la única alternativa a los de Valverde e irse cinco puntos ya de los de Solari. 

Tras un inicio del partido con mucho respeto por parte de ambos equipos y mayor domino inicial donostiarra, la primera ocasión del partido fue para los blanquiazules con una incursión desde el lateral del área Mikel Oyarzábal, que tras zafarse de Saúl remató raso pegado al poste izquierdo de la portería madrileña, donde se encontró con la primera parada del partido de Oblak en dos tiempos. A continuación, llegaron dos claras ocasiones para Atleti en el minuto dieciocho. La primera fue tras una falta de entendimiento entre Llorente y Rulli, que acabó rematando Álvaro Morata muy flojo, tanto que el defensa donostiarra acabó sacando el balón antes de que sobrepasará la línea de meta. A renglón seguido, un asistencia desde el lateral del área de Koke fue rematada de nuevo por Morata, pero se encontró con el cuerpo de Rulli evitando que el gol subiera al marcador. Pero ya en el minuto treinta, si que llegó el primer gol del partido, tras un saque de esquina botado por Lemar, prolongado con el hombro por Diego Godín hacia Morata, que con un excelente remate de cabeza en plancha envió el balón al fondo de las mallas de Rulli. Y tan solo tres minutos después, una falta en el borde del área lanzada por Koke llegó al área pequeña realista, donde de nuevo Morata, elevándose de manera extraordinaria remató de cabeza picando abajo el balón de nuevo al fondo de la red. Este segundo gol lo celebró haciendo el arquero, imitando al mítico Kiko Narváez. En el minuto treinta y ocho,  una buena galopada de Lemar, poco acertado un día más, acabó con un zurdazo del francés que salió por encima del larguero txuri-urdin. Con este 0-2 se llegó al descanso, con un buen Atleti, que fue de menos a más, siendo claro dominador sobre el terreno de juego en esta primera mitad. 

En la reanudación el primer remate fue para la Real en el minuto cincuenta por parte de Sandro, saliendo por encima de la portería de Oblak. En el minuto cincuenta y cinco después de una mala entrega de Lemar, Navas envió el balón al área del Atlético y de nuevo fue rematado por Sandro, saliendo esta vez por el lateral de la portería atlética. Y en el minuto sesenta y uno, una falta cerca de Koke de la línea de banda supuso su segunda tarjeta y en consecuencia el camino de los vestuarios para el canterano, lo cual suponía un claro contratiempo para el Atleti, cuando lo tenía casi todo controlado hasta ese momento. La siguiente ocasión llegó tras un centro de Sandro que remató de cabeza flojo Ion Bautista desde el punto de penalti y detuvo Oblak sin dificultades. Y un minuto después otro remate de cabeza, esta vez fuerte y colocado por parte de Mikel Merino, fue despejado por el esloveno con una gran estirada evitando el primer gol de la Real, en su paradón habitual de cada partido. El Atleti por su parte, tuvo una buena aproximación en el minuto ochenta y cuatro, tras una buena jugada Juanfran con pase para Griezmann y asistencia de este para Arias, cuyo remate fue despejado a córner por el blanquiazul Sandro, esta vez en labores defensivas. Y ya en el último minuto de descuento, un centro al centro del área rematado una vez más por Sandro salió cruzado cerca del poste izquierdo de Oblak. Poco después el árbitro señaló el final del partido en el que el Atleti supo nadar y guardar la ropa, incluso jugando con diez jugadores durante más de media hora, certificando la primera derrota de Imanol Alguacil en el banquillo donostiarra. 

Tras este buen partido y estos tres importantes puntos, afortunadamente sigue habiendo Liga y ahora toca centrarse en pensar en el siguiente derbi de la próxima semana en el Wanda Metropolitano, esta vez ante el Leganés, antes de cambiar el chip para poder pensar ya con los cinco sentido en la vuelta de octavos de la Champions en el Estadio Comunale ante la Juvetus de Turín.