Victoria importante con dos caras muy distintas de nuevo.

Kun y Forlán, de nuevo letales

Cualquiera que sólo viera la primera media hora del partido, no sería capaz de acertar el resultado final. Un equipo con mucha fuerza y empuje, el donostiarra, y otro, el Atleti,  impreciso y sin crear juego ni ocasiones (el primer tiro a puerta fue en el minutos 25'). Pero afortunadamente la historia cambio radicalmente en la otra hora del partido.  Ya incluso en el último cuarto de hora del primer tiempo, el equipo entendió que no se puede regalar sistemáticamente tanto tiempo en los partidos, y empezó a carburar, aunque inicialemente sin suerte. Dos tiros lejanos, uno del Kun que salió rozando el poste, y otro de Tiago al que respondió magistralmente Bravo. Fueron los primeros avisos de los que vendría tras el descanso. Así, acabaron los primeros 45 minutos, con 1-0 tras el tempranero gol de Llorente adelantándose a un lento y despistado Ujfalusi.

En el segundo tiempo, de nuevo se probaba suerte con tiros lejanos, uno de Forlán y otro de Simao que pasaron rozando los palos de la porterioa txuri-urdin. El equipo tenía el control del partido, y la Real era un mero espactador del buen juego rojiblanco, pero parecía que el dominio no iba a transformarse en justicia de cara al marcador como en tantas otras ocasiones. Pero lo suerte ha cambiado, y esta vez incluso en las decisiones arbitrales (por fin, ¡también tenemos derecho en esta nefasta temporada arbitral!).

La remontada empezó con un posible penalti por mano de Tiago ¿pegada al cuerpo? ¿involuntaria?. No, penalti. Pero, de la terrible losa del 2-0 (léase partido del Bernabéu), se pasó a un contragolpe magnífico iniciado por Reyes, continuado con una magistral jugada del Kun y culmninado con un remate certero a las mallas del uruguayo. Poco después otra jugada iniciada por Forlán con un pase a Ujfalusi y éste al Kun y el 1-2 en marcador. Tres pases al primer toque y golazo. ¿En fuera de juego? Discutible, pero subió  al marcador. Y como no hay dos sin tres, nuevamente la conexión Forlán-Kun propició un remate preciso del argentino que suponía matar el partido. ¿Cómo? No, de eso nada. Somos el Atleti, y nos teníamos que complicar la vida con el 2-3. A eso contribuyeron primero Godín, y después  un regalo de Simao, en un desafortunada jugada defensiva que no supimos despejar certeramente. Una vez más, tocaba sufrir. Pero Reyes, permitió a Simao redimirse de su error, que marcó el 2-4 tras un claro penalti provocado por una magistral jugada del andaluz. Y toda esta vorágine de acontecimientos se produjo en tan sólo 25 minutos. ¡Espectacular desenlace!.

A destacar, la magia de Reyes, el definitivo reencuentro del uruguayo con el gol y sobre todo, la genialidad infinita del MAESTRO Kun. En el lado negativo, una vez más la pájara inicial del equipo y la falta de contundencia de la defensa. ¡No podemos regalar tanto! ¡Todavía queda más de un mes para la Navidad!.

Y contrariamente a lo ocurrido en semanas pasadas, nuestra liga se cierra con un +2, +2 y +3 respectivamente. ¿Hay nuevos visitantes de nuestra Liga como el Español?. Esperemos que el próximo sábado en el Calderon, se descuelguen de nuestra Liga.

 

At. Madrid - 2 Ath. Bilbao - 1. Campeones de Copa en 1985 por sexta vez.

2-1. Hugo Sánchez fue decisivo en el Bernabéu para la consecución de nuestra sexta Copa del Rey.

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