1-3. ¡A Lisboa por la puerta grande! ¡El ATLETI estará en la final de la CHAMPIONS 40 años después!.

Pues sí señores atléticos, creánselo, no es un sueño. ES UNA AUTÉNTICA REALIDAD:  ¡EL ATLETI JUGARA LA FINAL DE LA CHAMPIONS EL PRÓXIMO 24 DE MAYO EN LISBOA!. Adrián, Diego Costa y Arda Turan firmaron una remontada excepcional al gol inicial del Chelsea de otro atlético de corazón:, Fernando Torres en otro partido más para la historia de 111 años de nuestro Atleti. Ahora, Lisboa será testigo del derbi más importante de la historia dle fútbol madrileño. Pero pase lo que pase, la gesta ya está realizada. ¡¡¡GRACIAS CAMPEONES!!! ¡¡¡POR PARTIDOS COMO ESTE, SOMOS DEL ATLETI NOSOTROS, NUESTROS HIJOS Y LO SERÁN NUESTROS NIETOS!!. Han pasado 40 años para volver a la gran final europea, pero la vuelta ha sido por la puerta grande. 

El partido fue diamatralmente opuesto al del Vicente Calderón, ya que en esta ocasión los dos equipos salieron a disputar el partido, aparcando el autobús defensivo fuera del estadio. Y esto fue lo mejor para el espactáculo, sobre todo en la primera mitad, ya que los dos equipos jugaron con idea de ganar, y no de conservar el 0-0 inicial como pasó en el partido de ida. En la segunda mitad, este escenario cambió, pero fue debido sobre todo a los antológicos segundos 45 minutos para la historia disputados por lo rojiblancos del Cholo.

Nada más comenzar el partido, el Atleti ya pudo adelantarse tras un chut desde el lateral que acabó estrellándose en el larguero del veterano Schwarzer. Fue un claro aviso de que los rojiblancos iban a por todas. Pero el Chelsea, a pesar de la alineación defensiva, jugo mucho más adelantado que en el partido de ida y con más intención de acercarse a la puerta de Courtois. Así, el dominio del partido era alterno pero sin claras ocasiones, hasta que en el minuto 36, tras una gran jugada de William, zafándose de dos defensas atléticos, pasó a Azpilicueta, que de dejó el balón a los pies de Fernando Torres, que desde cerca del punto de penalti, remató a las mallas del equipo de sus amores. El de Fuenlabrada, no lo celebró y casi pidió perdón a todos los atléticos desplazados hasta Londres. Sin duda, demostró que en su corazón sigue latiendo con sangre muy muy rojiblanca. Afortunadamente, el Atleti, lejos de sufire el golpe, reaccionó rapidámente, y antes del descanso logró el empate, tras una excelente jugada con un pase magistral de Tiago, que Juanfran evitó que saliera por la línea de fondo y con un gran pase, y tras pasar el balón entre defensas "blues", llegó a Adrián, la sorpresa del Cholo en la alineación, cuyo remate, tras botar en el suelo, se elevó y coló en la porteria inglesa y empezó a abrir las puertas del estadio de la Luz.

La segunda parte fue una auténtica exhibición atlética. Lo mejor: tenerla grabada en vídeo para enseñar a los niños el "abc" del fútbol. Fue simplemente "Magistral". A pesar de eso, pudo adelantarse el Chelsea, tras un gran remate de cabeza picado de John Terry al que Courtos reaccionó de manera excepcional con rapidez y grandes reflejos. Según Mourinho, fue la clave del encuentro, pero hubo muchas claves que esta parada, ya que a continuación, Samuel Eto´o, recién salido del banquillo, provocó un penalti de libro a Diego Costa, que el hispano-brasileño, se encargó de marcar con un fuerte disparo, tras "pelearse" con el balón, con el punto de penalti y con el árbitro, que incomprensiblemente le enseñó tarjeta amarilla. Pero lo importante, fue que la final estaba mucho más cerca. Y para certificar el pase a Lisboa, en medio de la perfecta sinfonía rojiblanca, llegó otra gran jugada, similar a la del primer gol, con otro pase genial de Tiago que de nuevo, Juanfran se encargó de hacer llegar a los pies del mago Arda que remató primero al larguero tras tocar Schwarzer y después rematar el rehace a las mallas del australiano. Suponía el 1-3 y el sellado definitivo del billete para la gran final. Tras el gol, el Chelsea, completamente desaborlado toda la segunda mitad, lo intentó pero se encontró con el GIGANTE Courtois, que rechazó con el pie un buen remate raso de Hazard, igual que unos minutos antes había rechazado a córner un remate al poste del equipo inglés.

Y tras la exhibición de poderío, fuerza, presión, precisión en el toque y fútbol de alta escuela de Stamford Bridge, el pitido final desató la euforia en el césped, en la grada y por los todos los rincones donde se respira el sentimiento rojioblanco atlético. Ahora empieza la carrera por la consecución de una de las pocas 17.000 entradas asignadas a cada equipo. ¡¡Enhorabuena para los que las consigan!!. Sin duda, la ocasión tan esperada, merece la pena.