1-1 El gol de Gameiro no bastó. El penalti fallado por el francés y el gol mal anulado a Griezmann sí hubieran permitido una merecida remontada. ¡No pudo ser!. 

Tras el 1-2 de la semana pasada en el Vicente Calderón, el Atleti tenía que salir a por todas en el Nou Camp y así lo hizo. En todo momento dio la cara y su falta de puntería y un error arbitral de Gil Manzano impidieron una merecida remontada. El Barça acabó pidiendo la hora ante un gran Atleti, que "murió con las botas puestas" en un nuevo alarde de "coraje y corazón" como en el partido de ida.  

Hasta cumplirse casi la primera media hora del partido, la eliminatoria fue una prolongación de la segunda parte del Carlderón, con un Atleti imponente, que generaba juego y múltiples ocasiones. La primera fue para Carrasco, que tras varios recortes, disparó desde cerca del área pequeña pero Cillessen evitó el gol con una gran parada. Le siguieron un buen remate de cabeza de Griezmann, un fuerte remate de Koke que rechazó como pudo el portero holandés, un zurdazo de Filipe Luis que se estrelló en el lateral de la red....A pesar de este aluvión inicial el marcador no se movió. El Barça, muy replegado hasta ese momento, empezó a resarcirse poco a poco del dominio rojiblanco, hasta que llegó el minuto cuarenta y dos. Y en ese momento apareció una vez más el crack azulgrana Messi. Se fue de hasta tres defensores para sacar un fuerte remate raso, que Moyá apenas si pudo rechazar, pero el killer Luis Suárez estaba allí para adelantar a los azulgranas. Demasiado premio para los de Luis Enrique, que se fueron al descanso por delante en el marcador a pesar de su clara inferioridad sobre el terreno de juego.

Posición correcta previa al gol mal anulado a Griezmann

Gameiro estrelló el penalti en el larguero

Gol del empate de Gameiro a pase de Griezmann

Y llegó la segunda mitad con ventaja para los catalanes. Fueron cuarenta y cinco minutos absolutamente "locos". Hubo de todo. Primero llegó la innecesaria expulsión de Sergi Roberto por doble amarilla en el minuto cincuenta y siete. Dos minutos después una combinación entre Carrasco y Griezmann acabó en el fondo de las mallas del Barcelona. Pero el árbitro anuló incomprensiblemente el gol por fuera de juego inexistente: grave error. A los sesenta y ocho minutos, un desgraciado resbalón de Carrasco, dejaba al Atelti también con diez jugadores. Poco después volvía aparecer el genio Messi. Esta vez, una falta muy lejana, se acabó estrellando en el larguero tras un gran lanzamiento del argentino. El Atleti siguió a lo suyo, cercando el área catalán. Así, en un balón en profundidad para Gameiro, Piqué cometió penalti. El lanzamiento del francés, esta vez Kevin, se estrelló contra el larguero antes de salir fuera. Pero esta desgraciada jugada, precedió a otra, en la que combinación francesa Griezmann-Gameiro volvió a funcionar par lograr el tanto del empate en posición dudosa, pero correcta. Faltaban ocho minutos más el descuento y la remontada todavía era posible. Antes de llegar el minuto noventa, Luis Suárez vio una dudosa segunda amarilla en un lance con Koke. El Atleti "vivía" en terreno azulgrana, incluso Moyá en un córner más en los cinco minutos de descuento, pero el pitido final acabó con las últimas embestidas rojiblancas y con ilusión albergada durante muchos minutos por los atléticos.

Una vez más la historia se repite y el Atleti se queda a las puertas de otra gesta. Pero las genialidades de Messi y Suárez en ambos partidos fueron determinantes. ¡Enhorabuena para los de Luis Enrique por el pase a su cuarta final consecutiva! Y por supuesto ¡ENHORABUENA A LOS DEL CHOLO POR MORIR CON LAS BOTAS PUESTAS! #OrgullososDeNuestrosJugadores una vez más.